De una u otra manera, la ética ha estado siempre presente en las sucesivas entregas de Mediterráneo Económico. Bien sea de forma explícita, o bien como referente en el que se enmarcaba, de forma transversal, el tratamiento de otras muchas cuestiones. Más allá del espíritu divulgativo de nuestra colección y del análisis que se hace en cada volumen de un tema socioeconómico concreto, todos los números se han caracterizado por presentar un cierto afán normativo. Es decir, la mayoría de los autores han participado en el debate sobre la legitimidad del comportamiento de los distintos agentes sociales en cada contexto determinado, y han tratado de sugerir propuestas a la pregunta fundamental de la ética: qué debo hacer. En el ámbito de la actividad productiva, del papel de empresas y empresarios en la economía, de la función de los poderes públicos o de las entidades financieras, por ejemplo. Porque la reflexión intelectual solo tiene sentido cuando aspira a reflejarse mínimamente en la acción, sin quedarse en un mero ejercicio de erudición..