En 2011 el movimiento estudiantil colombiano realizó grandes protestas, como pocas veces se ha visto en la historia reciente, para oponerse a la reforma de la educación superior. El ciclo de protesta se explica, en buena parte, por una EOP favorable debido al apoyo que consiguió el movimiento en diversos sectores sociales y algunos de la clase política. Sin embargo, tal grado de movilización no se habría producido sin la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), que aglutinó las principales organizaciones estudiantiles y, al plantearse como un espacio amplio, fue desbordada por el enrolamiento de estudiantes no organizados. El éxito del movimiento fue coronado por unas estrategias discursivas basadas en la reivindicación de la educación como derecho, que contrarrestaron la argumentación del gobierno y articularon a su lucha diversos actores.
In 2011 the Colombian student movement made huge protests, as has rarely been seen in recent history, to oppose the reform of higher education. The cycle of protest is due in large part by a POS favorable due to the support that it obtained the movement in sectors of the political class and the support of diverse social sectors. Nevertheless, such a degree of mobilization would not have taken place without the Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE), that agglutinated the principal student organizations and, on having appeared as a wide space, it was exceeded by the enrollment of students unorganized. The movement's success was crowned by discursive strategies based on the demand for education as a right which offset the government's argument and articulated their struggle different actors.