Barbara Landrevie
En nombre de la preservación del empleo, las fábricas de alúmina en las costas francesas se aprovecharon de una moratoria para poner fin a los vertidos de barros rojos en el Mediterráneo. Veinte años más tarde, la polución perdura y el empleo nunca ha aparecido tan amenazado, por falta de soluciones sostenibles. Los documentos que presentamos en esta investigación demuestran la importancia del desafío sanitario.