Mientras los Gobiernos ucraniano y moldavo sueñan con Occidente, una pequeña república disidente, encerrada entre esos dos países, no comparte sus aspiraciones. Pese a carecer de reconocimiento internacional, Transnistria obstaculiza los proyectos occidentales desde hace veintidós años, al requerir el aval de Rusia para cualquier solución. Este �conflicto congelado� aclara los factores clave de los combates en el Donbás.