Hadrien Clouet
Si se creyera todo lo que se dice en Francia sobre los empleos vacantes o sin candidatos, el país contaría con auténticos yacimientos de contratos de trabajo. Como el aguijón de la coacción parece no picar lo suficiente, esas versiones alimentan una intención política; reforzar el control de los desempleados. Sin embargo las cifras que se exponen no desmuestran lo que se pretende, sino todo lo contrario.