La Plaza de Capuchinos es uno de los espacios más representativos de la ciudad de Córdoba. Al igual que muchas de las plazas que forman el trazado urbano de la ciudad, es un espacio que surge a raíz de los acuerdos establecidos entre las comunidades que la configuran. Por un lado, el hospital de San Jacinto y por el otro lado, el convento del Santo Ángel de padres capuchinos. Ambas congregaciones llegaron a unos acuerdos que concluyeron con la apertura de lo que hoy día denominamos como Plaza de Capuchinos. A partir de la primera mitad del siglo XVIII, dicho espacio va a quedar plasmado en el trazado urbano y va a ir forjándose como uno de los lugares más emblemáticos y de mayor representación de toda la ciudad. Este estudio pretende mostrar dichos acuerdos y analizar el proceso que llevaron a cabo ambas comunidades hasta concluir con la apertura de la plaza.