Emilio Gómez Delgado
La seguridad jurídica es un principio básico en el tráfico mercantil global. Y un sistema jurídico que descansa en la fe pública registral para un sector de tanta relevancia como el inmobiliario, requiere que sus registros estén absolutamente coordinados. El mercado inmobiliario, cada vez más complejo y sofisticado, requiere que Registro de la Propiedad y Catastro sean herramientas que garanticen y apoyen la inversión y la creación de valor. En este artículo, en el contexto de la propuesta del Gobierno actual de reformar el régimen de ambos registros a través del Proyecto de Ley de reforma de la Ley Hipotecaria y de la Ley del Catastro, analizamos la relevancia de que ambos registros actúen de forma coordinada, aunque su existencia persiga fines distintos. Y proponemos alguna medida en aras a potenciar la seguridad jurídica y en consecuencia el número de transacciones.