La paulatina instrumentalización de los derechos humanos como bienes de consumo legitimadores de la hegemonía sociopolítica occidental, ha abierto una crisis conceptual en torno a lo que entendemos como democracia. La defensa a ultranza del individualismo como axioma indisoluble de la sociedad contemporánea ha supuesto el desmembramiento de la ciudadanía como colectivo participante y crítico, emplazado ahora a ejercer periódicamente sus derechos en citas electorales insustanciales. Ante este panorama, los medios de comunicación se debaten entre un servilismo implícito ante los poderes políticos y económicos, y la aspiración a ejercer su función social como elementos vertebradores del sistema a partir de la difusión de información de interés público, veraz y crítica.
The gradual manipulation of human rights as a consumer socio-political legitimation of Western hegemony, has opened a conceptual crisis around what we mean by democracy. The stubborn defense of individualism as inseparable axiom of contemporary society has led to the breakup of the citizens as a whole and critical participant, located now regularly exercise their rights in election. Against this background, the media are torn between an implicit subservience to the political and economic powers and the desire to exercise their social function as core elements of the system from the dissemination of information of public interest, truthful and criticism