Seis años después de finalizada la contienda que enfrentó por primera vez a las potencias europeas en un conflicto de envergadura mundial, el diario El Debate, propiedad de la Editorial Católica desde 1912 y bajo la dirección de Ángel Herrera, inició una columna regular que bajo un doble título (�De política inglesa� y �Figuras del Parlamento inglés�) comenzó a ofrecer una serie de comentarios sobre cuestiones relativas a la política desde Gran Bretaña. Esta referencia resulta significativa, pese a la falta de perspectiva histórica en aquel momento, ya que manifiesta un cierto giro en las posiciones del periódico. Para ello el diario contrató a un colaborador en Liverpool