Tomando como punto de partida hermenéutico lo que Martin Heidegger denominó como olvido del ser, en el contexto de su ambiciosa crítica a la metafísica occidental como ontoteología, se pone en ejercicio una hermenéutica analógico-icónica (deudora del modelo postulado por el filósofo mexicano Mauricio Beuchot) que permite recuperarlo en el ámbito jurídico, respetando la diferencia ontológica, mediante el recurso a la analogicidad y a la iconicidad como propiedades ontológicas del ser jurídico. Para ello se lleva a cabo una crítica de las principales ontologías jurídicas (iusnaturalismos, iuspositivismos y antiformalismos jurídicos), con el objetivo de articular ciertas bases que permitan desarrollar hoy una ontología analógico-icónica de lo jurídico