Gabriela Catterberg, Alejandro Moreno, Ignacio Zuasnabar
Los datos de encuestas pueden ser una herramienta efi caz para ayudar a las políticas en la lucha contra la corrupción. Pero, ¿qué tan confi ables son las encuestas para medir actitudes hacia la corrupción y comportamiento corrupto? En este trabajo se demuestra que las respuestas a preguntas sobre la corrupción son infl uidas por la conceptualización de la corrupción (lo que los individuos y las sociedades creen que es la corrupción y lo que no es), y consecuentemente, por el sesgo de deseabilidad social relacionado a esas creencias.
El Índice de Apego a la Ley, especialmente construido para este estudio, muestra que en sociedades como la argentina y mexicana, donde la corrupción tiende a ser alta, los encuestados expresan mayores niveles de apego a la ley y son más favorables al castigo de los actos de transgresión. Por el contrario, en Uruguay, donde la corrupción es baja, los encuestados son más tolerantes con dichos actos y menos propensos a considerarlos como formas de corrupción. Esta paradoja se explica por los diferentes conceptos de corrupción que tienen estas sociedades y el efecto consecuente en el sesgo de deseabilidad social.
Esta investigación se basa en datos de encuestas originales diseñadas y dirigidas por los autores.
Reliable survey data may be an effective tool to assist anti-corruption policies. But, how reliable are survey efforts to measure attitudes towards corruption and corrupt behavior? In this paper we demonstrate that responses to survey questions on corruption are infl uenced by the levels of awareness and conceptualization of corruption (what individuals and societies believe corruption is and is not), and by the differentiated social desirability bias created by such beliefs. An attachment to the law index based on survey data shows that societies like Argentina and Mexico, where corruption tends to be high, respondents express higher levels of attachment to the law and are more favorable to punishment of acts of transgression, whereas in Uruguay, where corruption is low, respondents are more tolerant of such acts and less likely to consider them as forms of corruption. This paradox is explained by the different concepts of corruption that these societies have and the consequent corresponding effect of social desirability bias.
The paper relies on original survey data designed and conducted by the authors.