Agustín Rubio Alcover
La moderna historiografía del cine español ha tendido a parcelarse en función de opciones metodológicas e ideológicas. Asimismo, las consignas antiempiristas y antipositivistas han tenido efectos perversos para un auténtico conocimiento del devenir de nuestra cinematografía, en particular por lo que respecta a su industria y al papel de los sujetos en la evolución de la misma. El presente trabajo aspira a terciar en este debate, y a aportar una propuesta de encuentro, razonada, crítica, constructiva y concreta. Para ello, se sirve de tres películas españolas clásicas �a saber: Goyescas (Benito Perojo, 1942), La calle sin sol (Rafael Gil, 1948) y Los peces rojos (José Antonio Nieves Conde, 1955)�, para aportar, respectivamente, datos en torno a la génesis de la primera; a la novedad técnica de la segunda; y a la autoría de la tercera. Con estos tres ejemplos, el autor señala cuál es la naturaleza de las lagunas historiográficas que en estos momentos son, a su juicio, más acuciantes; reordena las prioridades; argumenta las estrategias que considera más adecuadas para cubrir aquellos huecos; e ilustra el rendimiento que puede obtenerse de un uso equilibrado y no excluyente de las técnicas y las tecnologías tradicionales y contemporáneas, para un entendimiento más sistemático del objeto de estudio.