En el presente artículo se reflexiona críticamente sobre algunos de los procesos que están generando en grados superlativos, situaciones lacerantes de exclusión social, a la vez que se propone construir una sociedad inclusiva, para todos y para cada uno, en la que encuentren espacios múltiples de (auto) realización, los semejantes y los diferentes. Para ello, es clave facilitar la posibilitación de una nueva concepción de lo público significativo, para gestar emancipación en cada espacio de la vida cotidiana.