El trabajo que aquí se presenta se estructura en tres partes. En la primera se ofrece el marco teórico desde el que se aborda el problema general analizado: la representación de la diferencia en el marco de las relaciones interétnicas. En la segunda se subraya la importancia del estudio de este problema para el desarrollo de la educación intercultural y, más concretamente, para el mejor conocimiento de la forma en que uno de sus agentes fundamentales, el profesorado, construye esa diferencia. En la tercera se ofrece una interpretación de los resultados parciales de una investigación empírica. Se concluye que, al menos en este caso, la percepción de la diferencia étnica está ligada a la construcción de la propia identidad y a procesos de categorización jerárquica, que se explican por la capacidad del grupo dominante para clasificar y situar adscriptivamente a los otros en una escala de distancia cultural percibida. . . .