La Ley 14/2013, de 27 de septiembre, de apoyo a los emprendedores y su internacionalización regula la figura del denominado Emprendedor de Responsabilidad Limitada (ERL), que referido exclusivamente al emprendedor persona física, permite proteger la vivienda habitual de responsabilidad frente a las deudas que traigan causa de la actividad empresarial o profesional. Para poder aplicar este beneficio son exigidos determinados requisitos cuya delimitación es problemática.