En este trabajo se estudia la figura de la extinción causal del contrato de trabajo a petición del trabajador por motivos de salud y seguridad en el trabajo. En concreto, se analiza el alcance de la justa causa que permite al trabajador instar la resolución de su contrato, lo cual da derecho, en su caso, a una indemnización económica, siempre que se demuestre la conexión causal con el incumplimiento empresarial de referencia. Especialmente, se abordan las principales resoluciones jurisprudenciales y se apuntan algunos efectos derivados de las últimas reformas laborales. Asimismo se profundiza en las posibilidades de reclamar una indemnización complementaria por daños y perjuicios. Esta compensación tiene carácter adicional a la indemnización laboral tasada de treinta y tres días de salario por año de servicio y se presenta en la práctica como un cauce adicional de reparación de los daños y perjuicios sufridos por el trabajador. De este modo, la responsabilidad civil se configura como una vía complementaria de reparación del daño que se une a la indemnización laboral por resolución del contrato, a la responsabilidad objetiva de la Seguridad Social y, en su caso, al recargo de prestaciones sociales.