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Cada zona rural, cada área tranquila, tiene su paisaje sonoro característico, un valor natural que hay que conservar. Su ambiente acústico está dominado por el ruido de la naturaleza, aunque el hombre también tiene su papel en la configuración de este entorno. La ausencia de una metodología o unas pautas para la caracterización del paisaje sonoro de las áreas rurales genera un vacío en la legislación actual y en el campo de la planificación y ordenación del territorio para el desarrollo rural. En este estudio se plantea una primera metodología. Efectuando un exhaustivo trabajo de campo y mediante el mapeo del paisaje acústico se caracteriza el paisaje sonoro del una zona del municipio rural de Láncara, en la provincia de Lugo (Galicia, España). Se obtienen los mapas sonoros representativos de diversos índices y los mapas de propagación del sonido producido por las fuentes identificadas permitiendo delimitar las áreas tranquilas del territorio, esas áreas en las que el ruido de la naturaleza es claramente dominante y los bajos niveles sonoros caracterizan el lugar.
