El actual fenómeno del uso masivo de drogas remonta sus orígenes al corazón del siglo XIX en la Europa capitalista y antidemocrática. De modo que la industria del narcotráfico nace de la mentalidad económica moderna la cual consiste, en esencia, en buscar la manera de amasar la mayor fortuna al más bajo coste (material) aunque al más alto precio médico y social. Desde los años 1970, España, líder mundial de consumo de la cocaína, ha sido el principal punto de entrada de las drogas en Europa, con las consecuencias de todo tipo (100.000 muertos) que ello conlleva.