Los gigantescos incendios forestales del verano de 2010 revelaron los defectos del régimen. Sin embargo, el sistema puesto en marcha por Vladímir Putin tiene poco que ver con el de la época soviética. Se ha establecido un nuevo pacto social, en el que se conjugan libertad relativa de los indivuiduos y porder autoritario. Pero el país carece cruelmente de una clase intelectual capacitada para favorecer la innovación. ¿Lanzará el actual presidente verdaderas reformas?