El autor plantea la importancia de la relación causal que exite entre los distintos modelos de desarrollo e inserción internacional y las raíces socioculturales, ya que de éstas surgen estrategias y conductas muy distintas ante las necesidades de reestructuración, modernización y apertura. La configuración de la familia, la influencia religiosa, el papel de las elites, los contenidos del contrato social, entre otros factores, dieron lugar a una variedad de respuestas frente a los desafíos externos. Si todo esto no se tiene en cuenta, advierte, se restringe el universo de caminos viables y legítimos para la adopción de decisiones, reduciéndose el campo potencial de maniobra y las posibilidades de contar con el apoyo de los colectivos sociales.