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Clara Guillén Subirán
En época de crisis muchas cosas han cambiado, incluso la vuelta al trabajo. Ese momento considerado, en algunas ocasiones, como trágico ya no se valora como un mal trago que cualquiera deseaba eludir. Según un estudio elaborado por Grass Roots, la gran mayoría de los trabajadores están contentos con su regreso al trabajo y se siente optimista por tener un empleo estable durante esta época de crisis económica. Las conclusiones de este análisis revelan un dato hasta ahora inesperado: el 67% de los trabajadores se consideran afortunados por pertenecer a su empresa, simpatizando con los valores de ésta. Sólo el 13% afirma estar trabajando por no tener otra opción laboral y, más de la mitad de los empleados, constata que nunca se ha planteado cambiar de trabajo al volver de sus vacaciones. El saberse poseedor de un puesto de trabajo en estos tiempos que corren, es la mejor terapia para combatir el síndrome postvacacional, aunque como señalan los expertos, no se debe hablar de tal síndrome ya que "la depresión postvacacional no existe porque no tiene entidad clínica". Es cierto que existe un problema de adaptación al cambio en uno u otro sentido y requiere de un elemento esencial, el paso del tiempo, que no será el mismo para todas las situaciones ni para todas las personas. Parece ser que todo es cuestión de actitud y mentalizarse de que también se puede ser feliz trabajando. En opinión de los expertos los ingredientes que no deben faltar para alcanzar la felicidad laboral son la trascendencia, el reconocimiento y crecimiento personal.
