En las elecciones legislativas libanesas del 7 de junio se enfrentarán dos bloques, que sin embargo están aliados en el gobierno de unión nacional. De un lado, las fuerzas llamadas del 14 de Marzo, dirigidas por Saad Hariri, que reúnen la parte esencial de los suníes, una mayoría de drusos y una importante fracción de cristianos. De otro lado, una alianza estructurada en torno a Hezbolá chiíta y de la Corriente Patriótica Libre del general maronita Michel Aoun. Se trata de una verdadera revolución en la escena política libanesa.