El Ministerio del Interior, del que depende actualmente la Dirección General de Instituciones Penitenciarias, ha anunciado un plan para facilitar la resocialización de los penados terroristas, particularmente de los etarras, y ello redundaría en la obtención de beneficios penitenciarios y el adelantamiento de su excarcelación. De ahí la conveniencia de delimitar competencias dentro de nuestro sistema de individualización científica en un cumplimiento de las penas que controla �no sin importantes lagunas� el juez de vigilancia penitenciaria.