En la actualidad existen notables diferencias entre los distintos Estados miembros de la Unión Europea en los necesarios deberes de información que deben contener las ofertas contractuales y las diferentes modalidades de ejercicio del derecho de desistimiento. Con el objetivo de armonizar los aspectos más básicos de la protección de los consumidores y usuarios en el ámbito de la Unión Europea, se aprobó el 8 de octubre de 2008 la propuesta de Directiva del Parlamento Europeo y del Consejo de los derechos de los consumidores, que se ha materializado en la reciente Directiva 2011/83/UE, de 25 de octubre de 2011, sobre los derechos de los consumidores. Por ello, con este artículo se pretende dar una aproximación de la situación actual y reflexionar sobre la oportunidad y conveniencia de la regulación promulgada.