Gerardo Mario Goloboff
Hace ya 25 años fallecía en el Hospital Saint Lazare de París, a pocos metros de su apartamento de la rue Martel, Julio Cortázar, uno de los escritores argentinos de mayor proyección internacional, cuya presencia se mantiene asombrosamente activa. Sin embardo, pese a su enorme estatura como artista y como intelectual, dentro y fuera de su país, desde la derecha y desde la izquierda, fue objeto de cuestionamientos persistentes o de reconocimientos menguados que no hicieron justicia a su obra profundamente innovada y a su responsabilidad política.