La ciudadanía de la Unión ha sido objeto de una nueva sentencia del TJCE, que con fecha de 10 de marzo de 2010 ha vuelto a pronunciarse sobre la controvertida relación que desde su nacimiento ha establecido esta fi gura con la nacionalidad de los Estados miembros. El presente trabajo analiza dicha decisión desde la óptica de la jurisprudencia comunitaria en la materia, examinando su evolución y detectando nuevas consideraciones sobre las restricciones que el ordenamiento comunitario establece a los efectos de las medidas sobre nacionalidad adoptadas por los Estados miembros.
Recién alcanzada su mayoría de edad, la ciudadanía de la Unión parece así adquirir cierta emancipación de la rígida relación de dependencia que respecto a la potestad estatal sobre nacionalidad ha venido manteniendo desde su creación.
Citizenship of the Union has been the subject of a new ruling of the ECJ, which dated March 10, 2010, has returned to rule on the controversial relationship than since its birth has established this fi gure with the nationality of the member States. This paper analyzes the decision from the perspective of the case law on this subject by examining its evolution and attempts to detect new considerations about the restrictions that Community law provides for regulations of nationality taken by member States. Just come of age, citizenship of the Union seems to attempt some emancipation from the rigid relationship of dependency to the State authority on nationality that it has maintained since its inception.