Las singulares leyes riojanas de alteración de términos municipales han dado lugar al planteamiento de un conflicto en defensa de la autonomía local, que plantea a su vez interesentes cuestiones en orden a este proceso constitucional. En el plano relacional, en 2010, no se ha alterado el habitual clima de fricción que mantienen los ejecutivos estatal y autonómico. De otra parte, dentro del tradicional conflicto que viene manteniendo la Comunidad riojana con las Haciendas Forales del País Vasco, el llamado �blindaje� del concierto económico vasco ha continuado siendo la cuestión protagonista, si bien ya se halla en manos de la jurisdicción constitucional.