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Santiago González Ortega 
El presente trabajo versa sobre las medidas de Seguridad Social que se han introducido en el texto de la Ley 35/2010, de reforma del mercado de trabajo, partiendo de dos ideas básicas: una, que algunas de esas medidas ya habían sido incluidas en otras normas anteriores, también aprobadas para afrontar las consecuencias de la crisis económica en el ámbito sobre todo del desempleo, de forma que la Ley 35/2010 sólo las recoge, las matiza o amplía; otra, que en el marco de la reforma del mercado de trabajo, las medidas de Seguridad Social son sólo de acompañamiento sin ocupar, en ningún caso, un papel central. Partiendo de estos presupuestos, el artículo analiza con detalle las medidas de protección social relacionadas con la suspensión de los contratos o la reducción de la jornada como alternativa a la extinción, el recurso a la bonificación de las cotizaciones para incentivar la contratación indefinida de ciertos colectivos en situación particularmente frágil en el mercado de trabajo, así como otras medidas de Seguridad Social relacionadas con los contratos formativos, el compromiso de actividad de los desempleados, la protección por cese de actividad de los trabajadores autónomos y, finalmente, el control de las situaciones de incapacidad temporal para el trabajo, fundamentalmente la ocasionada por contingencias comunes.
