La constante preocupación por reducir el absentismo laboral ante las graves consecuencias que del mismo se derivan en el ámbito empresarial, organizacional y productivo, hace necesario analizar una de las más frecuentes causas del mismo: la incapacidad temporal. Incapacidad temporal entendida en un sentido amplio y que debe ir más allá de la mera contingencia protegida por el sistema de seguridad social y de la causa suspensiva de las prestaciones básicas del contrato. Incapacidad temporal pura y simplemente como limitación, por motivos de salud, para realizar la actividad profesional. Ahora bien, la justificación formal y/o material de esa dolencia puede producir diferentes consecuencias y en diversos ámbitos, siendo necesario actuar sobre los mismos para conseguir el objetivo perseguido de reducción del absentismo injustificado. Actuación que debe instarse desde todas las partes implicadas: entidades públicas, colaboradoras, empresario, representantes de los trabajadores y desde estos últimos. Solo una actuación integral de todas las medidas propuestas permitirá una real y efectiva reducción del absentismo laboral justificado o no, ya que en esencia también será injustificado aquel absentismo en el que, si bien concurre causa que lo justifique, se podría haber evitado de adoptar en origen las medidas más oportunas. El estudio que se presenta no pretende ser un análisis de la institución de la Incapacidad Temporal sino partiendo de su existencia intentar mostrar desde todos los ámbitos señalados las medidas ya existentes de lucha contra el absentismo, su eficacia o ineficacia y proponer aquellas aun pendientes, novedosas y que coadyuvarían, sin duda, a la reducción de aquél.