Europa cuenta ya con una floreciente y creciente comunidad de evaluación compuesta por académicos, evaluadores independientes, consultoras e instituciones que diseñan políticas de evaluación con el objetivo de profesionalizar el sector. La existencia de una Sociedad Europea de Evaluación activa favorece el impulso actual de la creación de programas universitarios de máster y postgrado que contribuyen proporcionar una formación específica y de producción científica que ayuda a mejorar el sector de la evaluación de políticas públicas.