La relación entre la Federación de Rusia y la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) ha fluctuado entre una cercana asociación estratégica y momentos de un virtual congelamiento de las relaciones. En este escenario, la administración de Vladimir Putin percibió en las recientes crisis nucleares norcoreanas una oportunidad para colocar nuevamente a su país en las «ligas mayores», pero esta vez apostando por un nuevo estilo de diplomacia que marcará a su sucesor Dmitri Medvedev.
The relationship between the Russian Federation and the Democratic People`s Republic of Korea (North Korea) has fluctuated between a nearly strategic association and moments of virtual freezing of their relations. In this scenario, Vladimir Putin`s administration saw in the recent North Korean nuclear crisis an opportunity to put his country again in the «major leagues», but this time betting for a new style of diplomacy that will mark his successor Dmitri Medvedev.