Como fórmula para la descentralización del Sector Público, el Sistema Foral es un caso claro de Federalismo Asimétrico, dado que las Haciendas forales pueden aplicar medidas fiscales que no están a disposición del resto de Haciendas Autonómicas en España. Analizado desde la perspectiva de la teoría de Federalismo Fiscal, el Sistema Foral ofrece la más amplia autonomía impositiva a las Haciendas subcentrales, pero a cambio de dejar a la Hacienda central sin apenas instrumentos fiscales. En su funcionamiento actual, presenta serios defectos en cuanto a la contribución a la financiación de los bienes públicos nacionales y la colaboración en las tareas de estabilización económica.
En términos cuantitativos, cuando analizamos el conjunto de flujos financieros entre la Hacienda Foral del País Vasco y la Hacienda central, la cantidad pagada minusvalora en más de 2500 millones de anuales la contribución de la Hacienda Foral, para el último período quinquenal sobre el que se dispone de datos (2002-2006).