Durante el período de crecimiento económico de los años anteriores a la crisis económica actual, las entidades bancarias, en especial las cajas de ahorros, siguieron un modelo de expansión consistente en una mayor presencia territorial a través de la apertura de oficinas dentro y fuera de sus zonas tradicionales. Precisamente, el objetivo de este artículo es analizar esa expansión territorial que han llevado a cabo estas entidades mediante un análisis provincial y determinar, a la luz de ese comportamiento, las consecuencias que se han generado sobre la situación actual de este sector.