El rápido avance de la industria basado en las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) diseña una futura economía que se aleja de las tradiciona- les estructuras manufactureras. Los instrumentos tradicionales de análisis ponen de manifiesto sus propios límites para entender qué está sucediendo en la nueva economía. Hasta hace pocos años la importancia del sector de la información y la comunicación estaba centrada en su propio desarrollo tecnológico (infraestructura); en la actualidad los efectos sinérgicos de este desarrollo se han extendido al conjunto de las ramas de actividad, por lo que el centro de interés debe basarse en el estudio de la economía digital. La falta de medidas de actividad de esta nueva economía es una realidad, lo que supone uno de los primeros obstáculos que hay que superar para comprender la magnitud de este nuevo sector con respecto al conjunto da la economía. Desde una perspectiva de economía aplicada son muy pocos los estudios que se han centrado en la medición de la economía digital. Este trabajo presenta una metodología que mide la nueva economía así como sus resultados aplicados al conjunto de la actividad económica. Esta cuantificación está basada en la aportación sobre el conjunto de la economía del sector informacional.