La actual no es la primera crisis severa que afronta América Latina y el Caribe, cuyos países han enfrentado su impacto desde una posición mucho más sólida. El Banco Interamericano de Desarrollo respondió de manera determinada apenas se comenzaron a sentir las primeras señales de alarma. En octubre de 2008, estableció el Programa de Liquidez para la Sostenibilidad del Crecimiento, una ventanilla de financiación cuyo objetivo es mantener el flujo de crédito a los sectores productivos de la economía. Las prioridades institucionales del BID responden a desafíos del desarrollo de la región e incluyen la formulación de una política social favorable a la equidad y la productividad; la infraestructura para la competitividad y el bienestar social; el apoyo a instituciones que promueven el crecimiento y el bienestar social; la integración competitiva internacional a nivel regional y mundial; y programas de protección del medio ambiente, que dan respuesta efectiva a los retos planteados por el cambio climático. El Banco Interamericano de Desarrollo cumple este año su 50 Aniversario. A lo largo de su trayectoria, el Banco ha sido un socio cercano y comprometido con el desarrollo de la región. Actualmente, el BID ha completado un proceso de realineamiento, lanzado en 2005, cuyo principal resultado ha sido una institución más ágil y eficaz. El Banco trabaja hoy en aras de un incremento de capital que permita dotar a América Latina y el Caribe de un socio para el desarrollo con la capacidad para dar respuesta a las necesidades crecientes de una región dinámica y en constante cambio.