Jaume Guía Julve
Los mercados, las empresas y las redes interempresariales representan las tres modalidades de organización económica más aceptadas. Sin embargo, estas modalidades no son singulares, y se ha comprobado que cada una de ellas puede adoptar un amplio abanico de formas diferentes. Desde sus orígenes, la teoría de la organización ha incidido en el análisis de las formas de organización formal. Más recientemente, este análisis se ha extendido a los sistemas interorganizativos o formas de organización interempresarial, e incluso a los mercados. En el presente trabajo se pretende configurar un marco conceptual amplio que permita el análisis unificado de todas las formas de organización económica, desde las formas más burocráticas hasta los propios mercados competitivos. Para ello, tras definir el problema de organización económica, y con objeto de identificar el origen común de esta pluralidad de formas, describiremos los mecanismos básicos de coordinación y motivación que han sido identificados en las literaturas sociológica, organizativa y económica, y que sustentan cualquier tipo de organización. Veremos, también, que todos estos mecanismos son e/producto de procesos de interacción social, principalmente interacción lingüística en forma de discurso y conversación. Después, procederemos a combinar estos mecanismos para explicar la particularidad de cada una de las tres modalidades de organización económica. Finalmente, se postula que los elementos importantes para explicar los fenómenos organizativos son los elementos básicos de coordinación y motivación, y no la forma organizativa genérica. A priori, un mismo problema organizativo puede ser resulto a partir de distintas combinaciones de mecanismos de coordinación y motivación.