Acceso usuarios
El Tratado de Lisboa supondrá un gran avance al diferenciar los actos del derecho derivado en función del procedimiento legislativo o no legislativo. La distinción entre las funciones legislativa y ejecutiva permite una mayor lógica de la toma de decisiones y, por tanto, una mayor transparencia de dicho proceso para los ciudadanos responsabilizando al Parlamento y al Consejo de las decisiones más importantes. Se constata una amplia indeterminación de los instrumentos normativos en la gran mayoría de los actos legislativos, lo que añadirá a los problemas propios del contencioso sobre las bases jurídicas el problema de elección de un instrumento normativo u otro. Las instituciones legislativas deberán justificar la elección a la luz de los principios de proporcionalidad y subsidiariedad. El principio de legitimidad democrática fundamenta la jerarquía entre los actos de derecho derivado. La jerarquía normativa se funda en el grado de legitimidad democrática que da origen a cada acto normativo.
