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El peso del sector del calzado en el total de la industria española no es muy elevado, aunque mayor en términos de empleo que de producción, rasgo que caracteriza a la industria como intensiva en la contratación de mano de obra. Esta característica no es exclusivamente española sino estructural del sector y ha conducido a la industria mundial a una búsqueda continua de mano de obra barata, de modo que hoy en día los principales productores mundiales son las economías emergentes. El sector español, con una amplia tradición fabricante y exportadora, se está viendo muy expuesto a la intensa competencia internacional. Este artículo muestra cómo la industria española está respondiendo a estos cambios, centrando el estudio en la evolución de las exportaciones. El análisis de este sector puede constituir un modelo de estudio de los efectos de la globalización en industrias donde los países desarrollados y emergentes vienen a competir en un entorno de alta intensidad competitiva e intensidad tecnológica baja.
