José Luis Machinea
La incertidumbre financiera asociada a la crisis hipotecaria de Estados Unidos y la mas reciente aceleración inflacionaria ligada al aumento de los alimentos y del petróleo está generando una desaceleración del crecimiento del mundo desarrollado y un incremento del costo del financiamiento en los países en desarrollo. Aunque la América Latina y el Caribe son menos vulnerables a choques externos que en el pasado no cabe duda que habrá costos importantes. Estos costos variarán entre países, dependiendo de la importancia de ¡as remesas y la magnitud y características de los bienes exportados a los países desarrollados. A ello es necesario agregarle el impacto de los mayores precios sobre la pobreza y sobre la tasa de inflación que pondrá presión sobre los bancos centrales de la región para aumentar las tasas de interés. Es probable que el impacto se perciba con mayor nitidez en la segunda mitad del año y en especial en el 2009
The financia! turmoil linked to the mortage crisis in the US and the more recent raise of inflation tied to the upswingof food and oil prices are producing a slowdown in the rate of growth of developed countries and an increase in the financing cost of developing countries. In spite of being less vulnerable to external shocks the región will face negative consequenees. The impact on the countries of Latín America and the Caribbean will depend on the size of remittances, the magnitude and characteristic of export oriented to developed countries and the financial needs. On top of that, the región faces the negative effect of the increase in food prices on poverty and on the acceleration of inflation, which is putting pressure on central banks to increase interest races. The negative irnpact will be more perceptible by the end of the year and in 2009