Algunos investigadores destacan las ventajas de la flexibilización del trabajo en la creación de empleo y otros abogan por fortalecer las instituciones que garantizan condiciones de trabajo digno. Para contribuir a este debate, los autores se preguntan en qué medida las condiciones de calidad del trabajo y el nivel educativo afectan la productividad. Mediante un análisis econométrico, concluyen que en el largo plazo los empleos de calidad tienen efectos positivos en la productividad.