El artículo analiza la naturaleza e identidad del Tercer Sector en España definido como espacio plural articulado para la producción de bienestar y democracia y cuyos rasgos concretos dependen del régimen de bienestar en el que se incardina. A partir de aquí se analiza la doble visión sociológica sobre la baja articulación del Tercer Sector: como situación provisional previa a la madurez organizativa y como naturaleza específica del Tercer Sector cuya dificultad de articulación se debe a su heterogeneidad irreductible y a su disparidad estructural. Esta última visión es la que desarrolla el artículo de forma que se defiende la tesis de que el Tercer Sector se caracteriza por su heterogeneidad sustantiva, dependencia financiera y baja articulación que conlleva, en este último caso, una raquítica coordinación interasociativa, aspectos todos desarrollados en el trabajo.