El artículo aborda desde la etología, pasando por la teoría del apego, la importancia del trabajo con vínculo paterno-filial en situaciones de maltrato a menores. La situación de la clínica ayuda a conceptualizar el devenir de los sujetos cuando el vínculo o el estilo de apego ha sido deficitario; sólo el abordaje del mismo ayuda a que no se repitan transgeneracionalmente episodios de maltrato. Asimismo, se ofrecen datos (desde una experiencia en trabajo concreta -CENYF-) donde se pone de manifiesto que una medida de protección, que sólo toma en cuenta la separación de los menores y no el bienestar global de la familia, está abocada a un mal pronóstico tanto para los padres como para los menores. (A.)