El instituto de la Laesio ultra dimidium no se utilizó para proteger a una de las partes del contrato, sirvió para defender a los enajenantes perjudicados que cobraban menos de la mitad de lo que el objeto vendido valía. Su aplicación fue excepcional y práctica. El contrato podía invalidarse cuando el precio producía una laesio enormis en el vendedor, estando en su derecho de resolver el contrato unilateralmente.
The Laesio Ultra Dimidium was not used to protect one of the parts of the contract, it served to defend the harmed seller who were charging less than half of what cost the object sold. The contract could be invalidated if the price produced a Laesio Enormis in the seller, being in the right unilaterally to terminate the contract.