Gilbert Cette
La reducción del tiempo de trabajo no puede constituir la solución milagrosa al problema del paro masivo que experimentamos. Sin embargo, en determinadas condiciones, puede constituir un paliativo cuyas posibilidades son sin duda nada despreciables. El cumplimiento de estas condiciones requiere incentivos que llevarían a empresas y empleados a practicar las formas más exitosas de reducción-reorganización del tiempo de trabajo en términos de empleos creados, sin deteriorar los saldos exterior y público. Pero la elaboración de incentivos simples y eficaces es delicada. Esta dificultad merece ser subrayada antes de considerar cualquier evaluación del impacto macroeconómico de una reducción del tiempo de trabajo.