Roberto Álvarez Llano
Sabido es que el sector agrario juega un modesto papel en el valor añadido bruto de la Comunidad Autónoma del País Vasco. Más concretamente, su participación ascendía al 1,7% del total del VAB a coste de factores generado en 1987 en la Comunidad, porcentaje que se ve ampliamente desbordado por el 51,4% contabilizado por los servicios y el 46,2% de la industria, comparándose positivamente sólo con el sector pesquero (0,7% del total). Sin embargo, el sector agrario tiene una importancia cualitativa que va más allá de la representación que le asigna la estadística. En efecto, junto a determinadas actividades que cuentan ya con una cierta entidad, el quehacer tradicional agrario constituye, en su conjunto, un potencial de gran interés para una base económica necesitada de nuevas alternativas que suavicen el fuerte peso del sector industrial de la región. Todo ello, hace pertinente profundizar en el conocimiento del sector agrario, que quizás no goza de la capacidad que tienen otras actividades para polarizar la atención investigadora.