El contexto empresarial actual ha conducido al fomento de la creación de empresas como pilar de los modelos regionales de crecimiento. No obstante, las elevadas tasas de fracaso empresarial, especialmente cuando se trata de pymes en sus primeros años de vida, están cuestionando su validez. Por tanto, no se trata sólo de crear un elevado número de empresas sino también de que sobrevivan en condiciones competitivas.
Sobre este particular, este trabajo pretende contribuir a la investigación realizada sobre esta temática proponiendo un modelo cuyo contraste, realizado con datos de un estudio longitudinal sobre una muestra de 101 pymes españolas de reciente creación, nos ha permitido analizar la relación existente entre el crecimiento de la empresa y la motivación del empresario para poner en marcha un proyecto empresarial. Los resultados obtenidos nos ayudan a comprender mejor el nivel de eficacia de las políticas de desarrollo regional que fomentan la creación de pymes como motor de generación de empleo.