Mª Amparo Pérez Simarro
Aunque, actualmente, nuestro ordenamiento jurídico no contempla definición alguna de esta nueva figura jurídica, comúnmente se viene aceptando la ofrecida por la Comisión Europea que, en fórmula descriptiva, establece que el teletrabajo es cualquier forma de trabajo desarrollada por cuenta de un empresario o un cliente, por un trabajador dependiente o autónomo o un trabajador a domicilio, y efectuada, regularmente y durante una parte importante del tiempo de trabajo, desde uno o más lugares distintos del puesto de trabajo tradicional, utilizando tecnologías informáticas y/o telecomunicaciones.