Narciso Paz Canalejo
La Ley 2/2007, de Sociedades Profesionales, ha suscitado -a la vez- esperanza y reticencias, pero la doctrina no se ha ocupado de un problema habitualmente orillado también en la etapa jurídica anterior: ¿es posible constituir una Sociedad Profesional en forma cooperativa? Este trabajo responde, afirmativamente y con varios argumentos, a esa cuestión y por ello, analiza las principales peculiaridades de la citada norma en relación con los principios y características del sistema cooperativo.