Este trabajo presenta el Estado federal como un tipo concreto de Estado compuesto, o unidad política integrada por diversas organizaciones separadas con sus propias competencias y ámbito de actuación, capaces de dotarse de sus propios ordenamientos jurídicos y con una legitimación política independiente. Las características del Estado federal se estudian precisamente al lado de las de otro tipo de Estado compuesto, el Estado autonómico. En ambos supuestos, nos encontramos con entidades capaces de adoptar decisiones políticas diferentes de las tomadas por el centro de acuerdo con un sistema de competencias establecidas constitucionalmente, contemplando asimismo instancias generales en las que se prevé la intervención de las organizaciones de descentralización territorial. Políticamente, se espera del Estado federal y del Estado autonómico un rendimiento también parejo; se esté pensando en las ventajas de un sistema en el que se acerque el poder a los ciudadanos o en el que la innovación política sea más fácil, o en el tratamiento de las tensiones nacionalistas. Con todo, las diferencias entre el Estado autonómico y el federal no desaparecen. Así, en el origen del Estado federal suele haber un pacto político que falta en el caso del Estado autonómico, en el que se da más una rectificación que una fundación propiamente tal. En el Estado federal, además, hay una completud institucional que no se produce en el Estado autonómico y, finalmente, la articulación institucional de Estado en su conjunto es más perfecta y acabada en la Federación que en el Estado autonómico.
This article presents the Federal State as a specific kind of composed political unity, divided into several sepárate organisa-tions with their own competences and fields of action, as well as a political legitimacy of their own. The features of the Federal State are studied alongside those of another kind of composed State, the State of Autonomies. Both are political entities capable of making decisions different from those made by the Center. From a political point of view, as well, both States are expected to function in a similar way, whether by making power come closer to the citizens or by handling nationalist tensions. The differences between the two, however, do not altogether disappear. The Federal State is usualíy based on a contract which is lacking in the State of Au-tonomies; the institutional structure of the latter is, in addition, less perfect and less complete than that of the formen.