El objetivo de este trabajo es el de plantear un escenario de reforma de la financiación municipal. El contenido del mismo se estructura en tres grandes apartados. En el primero de ellos se efectúa un recorrido lineal de los pormenores que ha tenido la financiación municipal desde la transición democrática. En segundo lugar describimos de manera sucinta las fuentes de financiación municipal, desde los impuestos a las transferencias, desde los recursos urbanísticos al endeudamiento. Este apartado expone algunas líneas básicas de las propuestas encaminadas a incrementar los recursos locales. El tercer apartado plantea y valora un escenario de reforma futura, a la vez que avanza algunas cifras del impacto fiscal que tendría la nueva financiación local, desde la hipótesis de que el objetivo de las Corporaciones locales sea la financiación completa de los servicios impropios. Además, el esquema de reforma propuesto permitiría mantener el nivel de inversiones locales de los últimos años, sin necesidad de buscar financiación en los recursos emanados del urbanismo o del crédito ajeno.
El modelo propuesto distribuye la carga de la financiación de los servicios impropios en la siguiente proporción: 25 por 100 Administración General del Estado, 50 por 100 Comunidades Autónomas, 25 por 100 Corporaciones locales.
Son pues las Comunidades Autónomas las que mayor esfuerzo deben hacer.
La concreción de las propuestas es la siguiente: a) aumento del Fondo de Participación en los Ingresos del Estado; b) creación de dos Fondos de Participación Autonómico, uno para financiar el gasto corriente, otro para financiar inversiones, y c) creación de un recargo local sobre la cuota del IRPF.
Obviamente, la implantación de estas medidas de carácter económico tendría que ser complementadas con la consiguiente redefinición de las competencias locales, materia propia de una Ley Básica del Gobierno y la Administración Local.